Hace 16 años Ángel Hernández Pulido, de Madrid, estuvo pasando unos días en su casa de San Juan como muchas otras personas que tienen una segunda residencia en la playa… hasta ahí todo normal pero, de repente, todo cambió: “la señora que tenía la concesión de tumbonas en la playa nos habló de Aigües, vinimos unos amigos, vimos que vendían una casa y, a partir de ahí, nos empezamos a enredar”, apunta Ángel.
Lo que le atrajo de Aigües es que seguía siendo un pueblo, sin masificaciones y donde la gente salía con su silla a la calle para tomar el aire y hablar con los vecinos. Un lugar muy cerca de la playa y de grandes núcleos urbanos pero con la identidad y la esencia de un lugar tranquilo, lejos del bullicio y con el encanto que tienen los pueblos.
Esa combinación de visitar un lugar especial y ver una oportunidad de compra es lo que le llevó a dar el paso. Cuando compraron la casa era una vivienda particular que había sido una antigua venta y sin ningún uso como establecimiento turístico “pero era muy grande para nosotros y decidimos hacer algo con ello”. El resultado fue transformar ese lugar en una posada rural conservando la estructura original de la casa, sus bonitos jardines y rendirle un homenaje a su identidad al llamarla La Venteta.
De esta forma, desde hace 15 años tenemos un escondite único con más de 100 años de historia en el que se puede disfrutar del mar, la montaña y el sol de mediterráneo en un ambiente lleno de tranquilidad y cercanía. Disponen de cinco dormitorios con personalidad única, una cuidada decoración y numerosos espacios para relajarse y dejarse invadir por el paso del tiempo como la piscina, los jardines, los salones y estancias comunes y las acogedoras estancias.
Precisamente, la filosofía de este alojamiento rural es que sus huéspedes se sientan como en casa lo que les ha permitido ser un referente desde hace 15 años y la prueba de ello es que tienen una clientela fija que les visita de forma habitual.
Parte del secreto está en esa atención tan cuidada, la belleza de La Venteta, la tranquilidad del turismo rural, su ubicación privilegiada y las novedades e innovaciones que van incorporando a lo largo de los años.
Entre ellas, por ejemplo, está la mejora de las telecomunicaciones y para desarrollar esta infraestructura contaron las Ayudas LEADER que les permitió invertir en su negocio. Para nosotros, señala el responsable de La Venteta, “es un recurso importante y a medida que van saliendo las convocatorias vemos si tenemos alguna necesidad que cubrir para pedirlas”.
Y es que las Ayudas LEADER ofrecen una subvención a fondo perdido para la creación o mejora de empresas rurales que estén ubicadas en el territorio del grupo de Acción Local (GAL) del sur de Alicante. La última convocatoria de 2022 ya está en marcha y se pueden solicitar hasta el 21 de julio.